Si bien menos niños y jóvenes se han enfermado con COVID-19 en comparación con los adultos, la pandemia sin duda ha tenido un gran impacto en sus vidas. Aunque, por lo general, los niños y jóvenes son resistentes a los factores estresantes que ocurren a diario, ellos han tenido que enfrentarse a los nuevos desafíos que ha traído consigo la pandemia, como por ejemplo el distanciamiento social, los cambios de rutinas y la pérdida del sentido de seguridad y protección con la que contaban antes. Esto los hace especialmente vulnerables a sentirse estresados, ansiosos o deprimidos.
Para algunos niños, estos desafíos son aún peores dado la manera desproporcionada en que el COVID-19 ha afectado a sus comunidades. En particular, los estadounidenses de raza negra y los latinos se han enfrentado a una cantidad desproporcionada de casos de COVID-19, y los estudiantes de raza negra y latinos han tenido menos acceso a hacer sus estudios en línea.
Las herramientas en esta página se crearon para enseñar a los niños y jóvenes habilidades que les pueden ayudar a enfrentar algunos de los desafíos asociados con la pandemia, como:
Puede encontrar más información sobre esto en la página Familias y niños | CDC de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
Con la práctica, estas habilidades pueden ayudar a los niños y jóvenes a reconocer cómo sus sentimientos se ven influenciados por lo que piensan y hacen. Las habilidades pueden ser útiles para lidiar con los desafíos relacionados con la pandemia del COVID-19 y otros factores estresantes que ocurren a diario y les serán útiles no solo ahora, pero a medida que crecen y hasta la edad adulta.
Además del estrés que ha generado la pandemia del COVID, algunos niños y jóvenes también experimentan estrés o trauma por causa de otros problemas. Eventos actuales o históricos, como el racismo que existe en la sociedad o la discriminación por motivos de raza, etnia, orientación sexual, identidad de género, nivel socioeconómico, religión o antecedentes culturales, pueden tener un impacto significativo en el bienestar emocional. Aunque estas herramientas no pueden ayudar a solucionar factores como la discriminación, las habilidades pueden ayudar a los niños a sobrellevar momentos y situaciones difíciles que no pueden controlar.
Es probable que los niños y jóvenes con ansiedad o depresión graves necesiten más de lo que estas herramientas pueden ofrecer. Si los síntomas son particularmente graves o duraderos, debe buscar ayuda adicional. Nuestra página de Recursos Adicionales ofrece algunas opciones para encontrar más información o conectarse con un proveedor de salud mental.
¿Por qué? Muchos niños y adolescentes luchan con sensaciones de estrés, ansiedad y depresión, particularmente durante la pandemia. Estas herramientas fueron creadas para promover el bienestar mental y emocional de niños y jóvenes, durante la crisis de COVID-19 y más allá.
¿Cómo? Las Academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina (National Academies of Sciences, Engineering, and Medicine, NASEM) hicieron posible este proyecto con fondos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (Centers for Disease Control and Prevention, CDC). NASEM reunió a un grupo de expertos para desarrollar formas de ayudar a los niños y jóvenes con las dificultades que enfrentan todos los días. Junto con expertos de ICF, crearon herramientas, basadas en la terapia cognitivo-conductual (TCC), para ayudar a reducir el estrés, la ansiedad y la depresión. Las herramientas están diseñadas para niños y jóvenes directamente, y para que los padres ayuden a niños y jóvenes con estrés, ansiedad y depresión. Los maestros y otros cuidadores también pueden utilizar estos recursos.
Hay más información disponible sobre este proyecto y el grupo de expertos en la página web del proyecto: https://www.nationalacademies.org/our-work/promoting-emotional-well-being-and-resilience.
Estrés. Es una reacción normal a las presiones diarias. Las presiones pueden provenir del exterior del cuerpo de una persona (algo que te sucede a ti) o del interior del cuerpo de una persona (algo que estás sintiendo). Un poco de estrés puede ser útil, si por ejemplo le da a una persona un impulso de energía y una sensación de urgencia para estudiar para un examen. Pero tener demasiado estrés a la vez o tener mucho estrés durante mucho tiempo sin suficiente descanso, puede hacer la vida más difícil y causar problemas para pensar y hacer las actividades del día a día. Cuando los niños o adolescentes se sienten estresados, pueden:
Ansiedad. Es una sensación de miedo o preocupación por cosas que puedan suceder en el futuro, o miedo o preocupación por la seguridad de uno o la seguridad de otros. Muchos niños y adolescentes tienen miedos o preocupaciones, pero algunos tienen tantos miedos y preocupaciones que estos interfieren con la escuela, el hogar o las actividades de juego. Cuando los niños o adolescentes se sienten ansiosos, sus músculos pueden ponerse tensos y su respiración y latidos cardíacos pueden volverse más rápidos. También pueden tener dolores de estómago, otros dolores o molestias corporales, sentirse cansados todo el tiempo o tener problemas para dormir. Es posible que tengan pensamientos inquietantes que sean difíciles de controlar. A veces, la ansiedad puede hacer que un niño o adolescente se sienta irritable o enojado. Algunos niños y adolescentes ansiosos se guardan sus preocupaciones para sí mismos, o es posible que ni siquiera se den cuenta de ellas y, por lo tanto, estos síntomas pueden pasar desapercibidos. Los siguientes son ejemplos de diferentes tipos de ansiedad que pueden causar dificultades en la vida diaria:
Depresión. Todos los niños y adolescentes se sienten tristes o sin esperanzas en algún momento de sus vidas. Sin embargo, algunos niños y adolescentes pierden interés en las cosas que solían disfrutar, o se sienten impotentes o sin esperanza aun cuando las situaciones se pueden cambiar. Cuando alguien tiene depresión, la forma en que solía comer o dormir puede cambiar, puede sentirse cansado y sin motivación para hacer cosas que normalmente disfrutaba, sentirse mal consigo mismo, sentirse más irritable y alejarse de sus amigos y familiares. También puede tener dolores de estómago o de cabeza. Puede tener problemas para dormir o dormir demasiado.Es posible que algunos niños y adolescentes no les dejen saber a los demás que se sienten impotentes y sin esperanza, y es posible que no parezcan tristes. La depresión también puede hacer que un niño o adolescente cause problemas o actúe desmotivado, haciendo que otros no se den cuenta de que el niño está deprimido o consideren incorrectamente al niño como problemático o perezoso. Los ejemplos de comportamientos que se observan a menudo en niños y adolescentes con depresión incluyen:
Manejo de los síntomas. Aunque experimentar sensaciones de estrés, ansiedad o depresión puede ser difícil, es importante recordar que estas sensaciones pueden cambiar y que existen herramientas que pueden ayudar a los niños y adolescentes a aprender a manejar estas sensaciones y a afrontarlas.
Hacer frente a estas sensaciones puede aumentar la confianza y brindar un mayor sentido de control. Pero a veces los niños y los adolescentes no pueden hacer frente a estas sensaciones por sí mismos. Cuando eso sucede, es importante buscar ayuda.
1. https://dictionary.apa.org/
El estrés puede ser causado por muchas cosas. A veces, la causa es una situación específica que puede ser muy difícil como...
Cuando el estrés es causado por eventos como estos, las sensaciones incómodas pueden desaparecer una vez que el evento haya terminado. Muchas personas también experimentan estrés que dura mucho tiempo sin descanso como...
Los pensamientos, sentimientos y comportamientos pueden ser difíciles de manejar cuando estos factores estresantes parecen estar fuera de nuestro control. Los recursos de la terapia cognitivo-conductual pueden ayudar a que las personas se concentren en lo que pueden controlar.
La terapia cognitivo-conductual (TCC) ayuda a que las personas noten cómo sus pensamientos afectan la manera en que se sienten y cómo se comportan. La TCC les ayuda a convertir los pensamientos que no son útiles en pensamientos más útiles para que se sientan mejor. Los expertos nos dicen que la TCC es la mejor terapia para niños, adolescentes y adultos con estrés, ansiedad y depresión.
La palabra "cognitivo" se refiere a lo que pensamos y la palabra "conductual" a lo que hacemos. La TCC puede ayudar a niños y adolescentes a...
La TCC no podrá solucionar todas las cosas que hacen que alguien se sienta estresado, ansioso o deprimido, pero puede ayudarlo a lidiar con esas sensaciones y a sentirse mejor.
Estas herramientas no enseñan todas las partes de la TCC, solo algunas de las habilidades más estudiadas y fáciles de usar. Aunque estas herramientas no pueden reemplazar a un profesional de salud mental, pueden ayudar a los niños y adolescentes a aprender a afrontar mejor el estrés y la ansiedad diarios.
NOTA: Se necesita tiempo para aprender un nuevo hábito, generalmente de 30 a 60 días, por lo que es importante que los niños y adolescentes sigan practicando estas habilidades con regularidad. No solo se beneficiarán hoy, sino que desarrollarán resiliencia y aprenderán a manejar el estrés a lo largo de su vida.
Las habilidades de la TCC que enseñamos aquí pueden ayudar a los niños y adolescentes a lidiar con el estrés, la ansiedad y la depresión, y pueden brindar a los padres, maestros y otros cuidadores herramientas para ayudar a los niños y adolescentes a aprender nuevas formas de afrontar situaciones difíciles. Estas son algunas de las habilidades de la TCC que cubrimos en estas herramientas:
Otras formas de pensar que no son de ayuda incluyen: “culparse a sí mismo”, o pensar que las cosas siempre pasan por su culpa, incluso cuando esas cosas están fuera de su control; “Leer la mente”, o pensar que otras personas piensan negativamente sobre ellos; El “debo de hacer esto” o decirse a sí mismos que deberían o deben hacer algo que tal vez no tengan la capacidad de hacer; y “el pensamiento catastrófico”, o enfocarse en los peores resultados posibles de alguna situación.
El lenguaje que usamos para describir personas y experiencias es importante. Significa cómo nos expresamos y cómo nos ven otras personas. Muchas veces, en inglés o español, usamos diferentes formas de sustantivos, pronombres o adjetivos que se basan en suposiciones sobre el género de una persona. Es posible que muchas personas no vean esto como un problema. Pero, para algunas personas, las suposiciones sobre el género no son precisas y pueden ser perjudiciales. Se utiliza un lenguaje inclusivo de género en todos los módulos para garantizar que todos los niños y adolescentes puedan conectarse con nuestros escenarios. En español, la ‘e’ se utiliza para asegurar que el género no esté marcado o para que el lenguaje sea inclusivo de personas quienes se identifican como mujer/niña, hombre/niño, ambos, ninguno o algo más.
Si necesitan apoyo inmediato, la Red Lifeline de Prevención del Suicidio está disponible las 24 horas del día, los 7 días de la semana en todo Estados Unidos. Puede llamar al (888) 628-9454.
Si estás buscando un proveedor que pueda brindarte apoyo para la salud mental de tu familia, puedes visitar los localizadores de tratamiento de MentalHealth.gov y Salud Mental en Estados Unidos (Mental Health America).Para obtener más información sobre la pandemia de COVID-19, visita los sitios web del CDC o del NIH.
Para obtener ayuda adicional, visita nuestra página de Recursos.